Holaaaaaaaa mi carta de Beethoven para Maradona

 

DE BEETHOVEN Y DIEGO PARA LA CULTURA

En el mundo del mas allá, en la zona más privilegiada de este mundo, se encontraban un sinfín de celebridades de todo tipo. Este mundo goza de la capacidad de influencia en el mundo de la vida, las grandes celebridades pueden manifestarse de maneras particulares siempre y cuando lo consideren pertinente a sus intereses. Las celebridades del sector de la música clásica, con Beethoven como principal referente, deseaban modificar el legado que hoy por hoy está implícito en la cultura, la principal modificación era hacer de su música algo no “clásico” o cambiar ese significante de pasado consiguiendo de esta manera un consumo más habitual y menos referencial. Para esto Beethoven buscaba negociar con una entidad sumamente versátil en cuanto a su alcance, perteneciente al futbol pero que una personalidad que trascendió las vidas de sus seguidores. Diego Armando Maradona era el elegido. Cabe aclarar que Maradona en el mundo de los vivos ya referencio a Beethoven y no de la mejor manera. “Si Pelé es Beethoven, yo soy Ron Wood, Keith Richards y Bono, todos juntos. Porque yo era la pasión del fútbol" decía Maradona cuando fue interrogado en 2012 por la comparativa de Pelé y Beethoven. Beethoven a partir de aquí enviaría una carta hacia el mundo del deporte, la zona de Maradona: “Diego, me comunico contigo en representación del mundo de la música con una misión, cambiar la cultura de manera radical algo que tu impronta supo hacer a lo largo de tu trayectoria. Aquella respuesta del 2012 la comparto hasta cierto punto, todos los que hoy componemos nuestro mundo tuvimos una pasión que, a día de hoy, se está deteriorando por las nuevas formas de tecnología del mundo de los vivos. Mi idea consiste en romper con las demarcaciones de cada época, mi música y tu futbol, a medida que pasa el tiempo, se explaya menos, la pasión a día de hoy está mucho más industrializada. Con esto, Diego, propongo usar las manifestaciones en forma de melancolía con el mundo de los vivos que, aunque sea cuestionen sus consumos, sus pasiones genuinas, sus intereses, hasta el fin de sus días si es posible. No para un retorno, si no para un avance. Aumentar el tacto con nosotros y disminuir el de la industria de hoy la cual, incluso, nos puede representar a su merced.”